Tardes de verano con juegos de construcciones

Recuerdo cuando era niño que durante las vacaciones de verano, el rato más aburrido del día era, la hora de la siesta o después de comer. Si estabas en la playa o en la piscina, no te dejaban bañarte hasta que “pasase la digestión”.

Y si estabas en la casa o en el apartamento… la tele era un rollazo, con los culebrones, y tus padres se apalancaban en el sofá o directamente se iban a la cama a echar la siesta.

Llevar algún set de juegos construcción en la maleta de viaje es una buena opción para mantenerlos ocupados y entretenidos durante las tardes de verano.

Entonces los niños, que nunca parábamos, teníamos que buscarnos la vida, bien con los juegos de mesa clásicos que teníamos a mano, como el parchís o el dominó, bien con algún juguete que nos hubieramos traido en la maleta.

Los juegos de construcción son una excelente manera de mantener a los niños ocupados y entretenidos durante las tardes de verano. Además de ser divertidos, estos juguetes también ofrecen muchos beneficios educativos.

Según varios estudios, los juguetes de construcción pueden ayudar a los niños a desarrollar y mejorar:

• Habilidades motoras y coordinación ojo-mano
• Razonamiento espacial
• Flexibilidad cognitiva
• Habilidades lingüísticas
• Capacidad para el pensamiento creativo y divergente
• Competencia social
• Habilidades de ingeniería.

También hay evidencia de que el juego complejo con bloques está relacionado con un mayor rendimiento matemático.

Para obtener el máximo beneficio de los juguetes de construcción, se recomienda incorporar elementos adicionales al juego, como la construcción a partir de plantillas, la realización de proyectos cooperativos y hablar con otros sobre las relaciones espaciales.

En resumen, llevar algún set de construcción en la maleta de viaje es una excelente opción para mantener a los niños ocupados y entretenidos durante las tardes de verano.

No solo es divertido, sino que también ofrece muchos beneficios educativos.